Tanto mi profesión como mi pasión por la genealogía y la
historia local, me conducen a sumergirme en los archivos, bibliotecas,
hemerotecas, bases de datos, cualquier tipo de fuente de información. Pero es
este segundo motivo; mi curiosidad por la investigación documental, la que más
me llena de satisfacción y me impulsa a seguirle la pista a personajes y sucesos que son como un puzle más o menos
complicado de construir, cuyas piezas van encajando con el hallazgo de cada
nuevo dato.
Hace unas tres semanas, estando en el Archivo Diocesano de
Guadix, conocía a Enrique Alhama Amador y a Merche, su esposa. Enrique, como
tantos otros usuarios que visitan el Archivo venía buscando antepasados (el
matrimonio reside en Madrid). Me pidió que le ayudara a encontrar el bautismo
de su bisabuelo Antonio Alhama Teba, nacido en Guadix en el año 1839, pero
lamentablemente no se conservaban las partidas de un intervalo de años.
Probamos suerte con el hermano de su bisabuelo, José Alhama Teba en los rollos
de microfilms de los libros parroquiales. Allí estaba, casi instantáneamente,
al localizar el año y la Parroquia de Santiago en el catálogo, de forma casi
prodigiosa detuvimos el rollo y la partida apareció ante nuestros ojos.
“José María de los Santos, hijo de Manuel Alhama, natural de
Montoro (Córdoba) y de Rita de Teba,
natural de Chinchilla (Albacete). Nacido
el día primero de noviembre de 1825”.
La alegría de Enrique fue enorme, enseguida comenzó a
contarme detalles de la vida de este curioso personaje que fue su tío
bisabuelo, paisano nuestro, que yo he ido completando con el descubrimiento de
más información.
José Alhama Teba y su hermano Antonio nacieron en Guadix, en
el mismo Guadix romántico de nuestro Pedro Antonio de Alarcón. Ocho años mayor
que el escritor, José tal vez durante su infancia y juventud debió conocer a
nuestro Perico Alarcón, al menos cruzarse en alguna calle con él, o compartir
estudios primarios con Torcuato Tárrago, el otro novelista ¿Quién sabe si
también pudieran ser amigos…?
Tampoco conocemos los motivos por los cuales sus padres,
foráneos, llegaron al Guadix decimonónico. Sí podemos conjeturar que siendo sus
hijos sombrereros al correr el tiempo, fuera esta también la profesión del
padre: Don Manuel Alhama Lara, natural de Montoro (Córdoba), pues en un anuncio
publicitario en el periódico El defensor granadino, dice que eran especialistas
en sombreros cordobeses y porque Madoz, en su Diccionario Estadístico e
histórico de los pueblos de España dice de Guadix: “Hay un gran número de
personas dedicadas a la fabricación de alpargatas, zapatos, obras de alfar y
sombreros…”.
Cuando José contaba con veintidós años, un suceso marcó su
juventud, fue encausado en el asesinato de un tal Juan Ortiz y por ofensas a su
hermano Nicolás, condenado a Cuatro años de prisión por el Juzgado de Primera
Instancia e Instrucción de Guadix. No he podido averiguar nada más al respecto
debido al mal estado en que se hallan los archivos judiciales. Sí hemos podido
saber que ambos hermanos se afincaron en Granada con su madre, Doña Rita de
Teba y Cruzado ya viuda y que José vivió en el número 1 de la Calle Zacatín,
cerca del negocio de sombreros que estaba en el número 44 de la misma calle.
Después de cumplir la pena, José conoció a Don Francisco de
Paula Ruet, pastor catalán, que lo inició en el conocimiento de la Iglesia
Evangélica protestante. Dicen de José Alhama que tenía una personalidad
desbordante y arrolladora, de aspecto algo tosco y robusto. Muy pronto se
convirtió en el líder de los protestantes granadinos, comenzando a predicar el
Evangelio en el mercado de Granada.
En 1860 la policía registró su casa y le incautó
documentación en la que constaban los nombres y apellidos de varios
protestantes granadinos. El juez los procesó a todos por tendencia a la
propagación de ideas democráticas y antirreligiosas. La Audiencia Provincial de
Granada condenó al malagueño Matamoros y a José Alhama a ocho años de prisión
por delitos de apostasía pública y tentativa contra la religión católica.
He podido localizar algunas noticias en la prensa de la
época. En El Clamor público: periódico del partido liberal, aparece la noticia
de la detención de Alhama y de otras personas entre las que se encontraban
familiares como su madre, Rita de Teba y su esposa, Piedad de Montes y Segura,
natural de Guadix, como implicados en las revueltas de Loja. El proceso tuvo un
eco internacional bastante importante que ejerció presión sobre el gobierno de
Isabel II, finalmente se les conmutó la pena de prisión por la de destierro. Se
exiliaron a Gibraltar, donde José estableció una sombrerería.
José Alhama, demócrata y republicano, en el período demócrata
fue elegido Concejal del Ayuntamiento de Granada. También fue masón, al igual
que su hermano Antonio. Hay constancia
de que José fue miembro de la logia “Lux in Excelsis” con el nombre simbólico
de Mazzini: ideólogo de la unificación italiana. Antonio Alhama perteneció a la
misma logia con el seudónimo de Favila, donde ejerció como limosnero con el
grado 3. Otro miembro de la familia: José Alhama Herrera, hijo de Antonio,
también fue sombrerero y masón, con el nombre de Zorrilla.
José Alhama Teba Murió en Granada el 5 de abril de 1892 y
sepultado en el cementerio civil, mas tarde sus restos se trasladaron de forma
clandestina al cementerio católico. Tuvo al menos dos hijos que aparecen en la
foto familiar. Uno de ellos fue Manuel Alhama y Montes, educado en Inglaterra y
Francia, al igual que su hermana.
Guadix vio nacer a esta familia: hombres apasionados,
emprendedores, luchadores y de una amplia cultura, dotados de un gran espíritu
crítico. Ese espíritu que hace a los hombres libres, capaces de transformar la
sociedad que los rodea.
Carmen Hernández Montalbán
Muy interesante, soy Manuel Sánchez, hijo de Manuel Sánchez Alhama, primo hermano de Enrique Alhama Amador. Buen trabajo!!
ResponderEliminarGracias Manuel, me alegro que te haya interesado. Seguro que hay mucho todavía por descubrir sobre esta familia.
ResponderEliminarSaludos!!
Muchas gracias por este pedacito de la historia de Guadix, que de no ser por ti, seguramente hubiera dormido el sueño de los justos y jamás hubiera visto la luz.
ResponderEliminarMe ha encantado Carmen, no dejas de asombrarnos con estas historias tan verídicas y tan nuestras, que tanto dicen de los hombres y mujeres de Guadix, un saludo y gracias.
ResponderEliminarAcabo de leerte y me encanta, porque recuerdo a mi madre cuando en los ratos de cenas y comidas nos contaba historias algunas de ellas sobre Guadix y sus gentes.
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